Nuevos Horizontes...

by **Tinë Aina** Tue Jan 05, 2010 10:06 pm

Despues de llegar a Ciudad Central me dirigi a la Academia de Alquimia, habia sido un largo viaje desde los bosques del Norte a La Ciudad, la despedida habia sido dura, podia no volver en decadas, incluso siglos. tube que hablar con King Bradley para que aceptara mi condicion de Alquimista Independiente, dada mi naturaleza y mi particuliaridad con la alquimia, no se me podia pedir dar clases, puesto que era imposible enseñar mi alquimia a otro. Pero le parecio muy interesante tenerme en sus filas, y yo me comprometi a ayudarle (misiones) siempre y cuando no fuese en contra de mis principios y me negue a formar parte del ejercito, incluso como alquimista nacional, de momento, a no ser que las circunstancias cambiasen.

Una vez aclarados todos los aspectos de mi llegada con King Bradley pude dirigirme al dormitorio que me habia sido asignado, llevaba mi bolsa con lo esencial, que crei poder necesitar.

Por ahora solo King Bradley conocia mi condicion de elfa. Me gustaria que siguiese asi de no ser extrictamente necesario, o encontrar a alguien en quien confiar... No veia el que fuese algo que de saber comun, beneficioso. La Diosa, los espiritus de la naturaleza y el poder de mi pueblo me ocultaban de curiosos, desde el momento que puse un pie fura de los bosques, que estaban controlados por mi pueblo, solo bajo mi consentimiento se sabria mi naturaleza y circunstancias, aquel que intentase indagar nada sobre mi en cualquier momento, por otros medios, cualesquiera, solo se toparia con "nada", sin respuesta. Asi mismo mi padre otorgo a la gema de mi frente el poder de resguardar mi mente, él era un gran hechicero e intento protegerme con todo lo pudiese, no se fiaba de los seres que vivian fuera del bosque y sus artes.
Sabia que King Bradley no diria nada [-la Diosa, mi gente y los espiritus estan conmigo...-] susurre mientras seguia mi camino.

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